By Staff Reporter (staff@latinospost.com) | First Posted: Dec 16, 2014 01:50 PM EST

El Departamento de Vehículos Motorizados de California se prepara para el diluvio de nuevas solicitudes el próximo año una vez que una ley que permite a los documentados solicitar licencias entre en efecto el 2 de enero.

La ley, que fue aprobada este año, permite al estado emitir licencias a indocumentados que pasen la prueba de manejo oficial. Para prepararse para los anticipados 1.4 millones de solicitudes, el DMV ha contratado a más de 900 personas más, extendido sus horas y abrió cuatro nuevas oficinas en Granada Hills, Stanton en Orange County y Lompoc en Santa Barbara County. Además, una nueva oficina de gran tamaño en San José incluye 54 ventanillas de atención. En conjunto, el estado invirtió $141 millones en el manejo de las solicitudes de licencia especiales para los próximos tres años.

"Nos hemos estado preparando por más de un año," dijo el portavoz del DMV Armando Botello a Los Angeles Times. "Definitivamente estamos listos."

Defensores de la ley dicen que hará los caminos más seguros para los conductores al asegurar que todas las personas detrás del volante hayan pasado pruebas escritas y de manejo y permitirles obtener seguro de conducir.

"Los indocumentados ya no están en la sombras," dijo el Gobernador de California, Jerry Brown, cuando firmó la ley en 2013, según Fox News Latino.

Así mismo, el autor de la ley, el Asambleísta Demócrata Luis Alejo, también cree que la ley ayudará a la población indocumentada.

"Nuestro estado se prepara para ofrecer a estas familias la oportunidad de trabajar, la oportunidad de llevar a sus hijos a la escuela y una oportunidad para llegar al hospital durante emergencias médicas al permitir a californianos indocumentados obtener una licencia," dijo.

Sin embargo, defensores de derechos de inmigrantes dicen que las licencias podrían causar discriminación para los indocumentados que buscan vivienda o hacer una compra ya que serán diferenciadas con la frase "limitaciones federales aplican" en el frente, y la oración "Esta tarjeta no es aceptable para propósitos federales oficiales" en la parte trasera.

Legisladores Republicanos, por otro lado, critican la ley como una medida para recompensar el comportamiento ilegal.