By Staff Reporter (staff@latinospost.com) | First Posted: Feb 11, 2015 09:43 PM EST

La Procuraduría General de la República (PGR) de México dio a conocer que este martes 10 de febrero detuvo a Carlos Mateo Aguirre Rivero, hermano del ex gobernador de Guerrero, ángel Aguirre Rivero, junto con otras seis personas acusadas de desviar recursos del erario.

De acuerdo con información compartida por la agencia Reuters, Carlos Aguirre está acusado de participar en un esquema de desvío de dinero del presupuesto público a sus cuentas personales por alrededor de 287 millones de pesos (casi 20 millones de dólares).

La PGR destacó que entre 2012 y 2014, Carlos Aguirre y otros colaboradores presuntamente desviaron a cuentas personales recursos que recibían de los gobiernos local y federal a través de varias empresas.

Tomás Zerón, director de la Agencia de Investigación Criminal de la fiscalía federal, confirmó en una rueda de prensa celebrada este martes que la detención del hermano del ex gobernador de Guerrero se realizó por elementos federales, luego de confirmarse el desvío de recursos del erario.


Según rescata el portal mexicano Aristegui Noticias, las autoridades mexicanas indicaron que familiares y ex colaboradores del gobernador con licencia de Guerrero fungieron como representantes legales o apoderados autorizados en las empresas donde se operaba el desvío de recursos.

La PGR señaló que Carlos Mateo Aguirre fue nombrado coordinador Ejecutivo Estatal en 2011, una dependencia creada por el gobierno anterior al de su hermano, y de la cual supuestamente se habría beneficiado a través de contactos.

Cabe destacar que ángel Aguirre Rivero, ex gobernador del estado de Guerrero, solicitó una licencia de trabajo en octubre pasado, después de que la ciudadanía y los medios de comunicación criticaran fuertemente su administración tras la desaparición de 43 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa, rescató Reuters.

Las autoridades confirmaron más tarde que los jóvenes fueron detenidos por policía del municipio de Iguala y entregados a una organización criminal conocida como "Guerreros Unidos". Tras varios meses de investigación, las autoridades mexicanas aseguraron que los jóvenes fueron asesinados y sus cuerpos calcinados por miembros de la organización criminal.